En el mundo moderno, una de las industrias más importantes es sin duda alguna el turismo. Hay países que, utilizando una visión global de todo su potencial turístico, han logrado crear y poner en oferta al mundo entero, circuitos que generan un tremendo movimiento económico.
El Perú es un país privilegiado, que cuenta con infinidad de atractivos turísticos, pero que no han sido debidamente explotados en cuanto a su difusión. Indudablemente hay mucho por hacer en el campo turístico, toda vez que ni siquiera el propio peruano conoce muchos de los lugares que pueden ser alternativas para un viaje turístico. Esto sin duda denota la falta de difusión a nivel local de los atractivos que el Perú ofrece.
Si hablamos del turismo en nuestra Amazonía, existen diversas opciones como el turismo vivencial, ecoturismo, turismo científico y de investigación, turismo de aventura, turismo gastronómico, etc. Muchas cosas se podrían aprovechar de la Amazonía y su diversidad, pero primero hay que conocerla.
En este vídeo, podemos escuchar a Rafael quejándose de la falta de apoyo. Para ayudar a una comunidad nativa tan pequeña como los Boras, no se necesita de grandes inversiones. Rafael manifiesta que necesitan un grupo electrógeno para poder trabajar de noche. ¿Es acaso una tarea imposible, que algún organismo estatal haga una gestión para conseguir un grupo electrógeno?
Todo es cuestión de tener iniciativa y voluntad para hacer las cosas. Nuestros amigos los Boras, son la imagen de nuestra Amazonía ante el mundo, y no podemos permanecer indiferentes ante sus problemas.
El 31 de diciembre de 2012, fui al Aeropuerto Jorge Chávez para despedir a un familiar. Era la 1:00 am y en medio de los pasillos del segundo nivel, vi a un grupo de personas durmiendo en el piso. Pasé casi sin detenerme, cuando de pronto escuché un grito: "¡Julyyyyy!". Volteé la cabeza para ver quién era, y grande fue mi sorpresa al darme cuenta que, toda esa gente que dormía en el piso, ¡eran mis amigos los Boras!
Rafael me contó que estaban regresando del Cusco, a donde habían viajado con sus propios recursos. Desde Lima a Cusco lo hicieron en bus ida y vuelta. Pues resulta que ellos fueron a probar suerte y tratar de vender sus artesanías, presentar sus danzas, etc., pero lamentablemente les fue muy mal. A esas horas estaban a la espera del vuelo que los llevaría de vuelta a Iquitos y aún no habían cenado nada. Un ángel apareció y les dio algo de dinero para que comieran en el aeropuerto.
Sentí mucha pena mezclada con rabia. Los Boras deberían ser gente sin carencias económicas que los obligue a buscar suerte en otros lares. Y si hay alguien que quiera llevarlos, tendría que ser un organismo estatal como por ejemplo Promperú. Total, los Boras han llevado la Marca Perú hasta Italia.
Rafael me contó que estaban regresando del Cusco, a donde habían viajado con sus propios recursos. Desde Lima a Cusco lo hicieron en bus ida y vuelta. Pues resulta que ellos fueron a probar suerte y tratar de vender sus artesanías, presentar sus danzas, etc., pero lamentablemente les fue muy mal. A esas horas estaban a la espera del vuelo que los llevaría de vuelta a Iquitos y aún no habían cenado nada. Un ángel apareció y les dio algo de dinero para que comieran en el aeropuerto.
Sentí mucha pena mezclada con rabia. Los Boras deberían ser gente sin carencias económicas que los obligue a buscar suerte en otros lares. Y si hay alguien que quiera llevarlos, tendría que ser un organismo estatal como por ejemplo Promperú. Total, los Boras han llevado la Marca Perú hasta Italia.
Junto a Rafael y su nieta.
Con Clarita, esposa de Rafael.
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